Por Borja Vilaseca
El control, los celos y el afán de poseer nacen del miedo a perder lo que se tiene. Son enemigos sutiles que destruyen la confianza y la libertad. Aunque pueda parecer lo mismo, el apego es lo contrario del amor.
Los seres humanos vivimos atrapados por una perversa paradoja. Y ésta se revela, sobre todo, en nuestra manera de relacionarnos con todo lo que podemos ver, tocar y disfrutar. En un primer momento, sufrimos por querer lo que no tenemos. El deseo nos lleva a poner nuestro foco de atención en alguien o algo muy concreto, como por ejemplo la persona que nos gusta, el trabajo soñado, más tiempo libre o un coche deportivo.
Sin embargo, por el camino nos olvidamos de nosotros mismos, de lo que verdaderamente necesitamos. Y al obsesionarnos con el objeto de nuestro deseo, de forma inconsciente terminamos idealizándolo. De hecho, llegamos a creer que cuando lo obtengamos nos proporcionará la felicidad de la que carecemos.
La paradoja surge cuando finalmente conseguimos eso que tanto anhelamos. Por muy absurdo que parezca, de pronto comenzamos a sufrir por miedo a perderlo, a que nos lo estropeen, a que nos lo quiten. Y este temor contamina nuestra mente y nuestro corazón con dosis diarias de ansiedad, nervios y preocupación, atascándonos en un callejón sin salida: no podemos vivir felices con ello ni sin ello…
DEVORADOR DE BIENESTAR
“Vivimos encadenados a lo que llamamos felicidad.”
(Anthony de Mello)
Detrás de nuestros deseos y nuestros miedos se esconde uno de los virus más letales que atenta contra la salud emocional de nuestra especie: el apego. Según la Real Academia Española significa “afición o inclinación hacia alguien o algo”. Popularmente, también se considera sinónimo de “afecto, cariño o estimación”. Pero estas definiciones tan sólo ponen de manifiesto lo poco que conocemos a este gran devorador de nuestra paz interior.
De hecho, hay quien dice que el apego es “natural” y “sano”, pues es una muestra del “amor” que sentimos por aquello a lo que vivimos apegados. E incluso algunos afirman con cierto orgullo que “cuanto más apego se tiene, más se ama”. Pero nada más lejos de la realidad.
Y entonces, ¿qué es el apego? Podría definirse como “el egocéntrico afán de controlar y poseer aquello que queremos que sea nuestro y de nadie más”. Estar apegado a alguien o algo también implica “creer que eso que nos pertenece es imprescindible para nuestra felicidad”. Sin embargo, provoca en nosotros el efecto contrario. Más que unirnos, el apego nos separa de lo que estamos apegados, mermando nuestro bienestar y nuestra libertad.
LOS CELOS NO SON AMOR
“El amor es una palabra maltratada y pisoteada por la sociedad.”
(Jiddu Krishnamurti)
“Sin ti no soy nada”. “Lo mejor de mí eres tú”. “Necesito saber que me deseas”. “No puedo pasar un día entero sin saber de ti”. “Soy celoso porque te amo”. “Por ti sería capaz de matar”… Por muy románticas que puedan sonar, este tipo de frases hechas suelen pronunciarse en el seno de una pareja envenenada por el apego.
Al creer que nuestra felicidad depende de la persona que queremos, destruimos cualquier posibilidad de amarla. Bajo el embrujo de esta falsa creencia, nace en nuestro interior la obsesión de poseerla, de garantizar que esté siempre a nuestro lado. Y el miedo a perderla nos lleva a tomar actitudes defensivas y conductas preventivas. Es entonces cuando aparecen los celos. Etimológicamente, esta palabra proviene del griego “zelos”, que significa “recelo que se siente de que algo nos sea arrebatado”. Son un síntoma que revela que vemos a nuestra pareja como algo que nos pertenece.
Además, al estar apegados ya no la amamos por lo que es ni respetamos lo que le gusta hacer, sino que intentamos cambiarla y ponerle límites. Y así el conflicto está garantizado, manchando nuestra relación de tensiones y resentimientos. Curiosamente, el mismo apego que nos ha separado, a veces nos mantiene unidos por temor a quedarnos solos, a lo que digan los demás… Ya no hay amor, pero estamos enganchados por el invisible pegamento que derrama sobre nosotros el apego.
LA PRISIÓN DEL MATERIALISMO
“Lo que posees acabará poseyéndote.”
(Chuck Palanhiuk)
Más allá de dañar nuestras relaciones, este parásito emocional también pervierte todo lo que nos gusta e interesa a nivel profesional. Sin ir más lejos, el apego está presente en nuestro afán de éxito. Movidos por el deseo de ser reconocidos y sin apenas darnos cuenta, podemos llegar a delegar nuestra felicidad en el estatus social y profesional alcanzado, midiendo nuestro valor como personas en función de los resultados que obtenemos.
A veces nos obsesionamos tanto por la meta, que nos olvidamos de disfrutar el camino que nos conduce hasta ella. Y no sólo eso. La ambición y la codicia pueden terminar corrompiendo aquello que un día amábamos hacer, condicionando nuestras motivaciones y nuestra forma de trabajar. Según un proverbio oriental, “cuando un arquero dispara una flecha por el puro placer de disparar, mantiene con él toda su habilidad. Cuando dispara esperando ganar una hebilla de bronce, ya se pone algo nervioso. Pero cuando dispara para ganar la medalla de oro, se vuelve loco pensando en el premio y pierde la mitad de su habilidad, pues ya no ve un blanco, sino dos.”
Confundidos y desorientados, solemos seguir buscando fuera lo que no encontramos adentro. Así es como el apego se adueña de la denominada “compulsión consumista”. Primero nos compramos un buen coche. Luego invertimos unos cuantos euros más para conseguir otro mejor. Y así continuamos hasta que finalmente pagamos lo indecible para obtener el número uno del mercado. Lo mismo solemos hacer con el resto de productos y servicios que nos vendemos los unos a los otros en la vorágine del día a día laboral.
Sin embargo, ¿cuánto dura nuestra satisfacción? ¿Qué es lo que nos aporta comprar lo que en el fondo sabemos que no necesitamos? Si somos honestos con nosotros mismos, tal vez descubramos el verdadero precio que estamos pagando por seguir buscando en el lugar equivocado. En palabras de Buda: “Lo que más me sorprende de la humanidad son los hombres que pierden la salud para juntar dinero y luego pierden el dinero para recuperar la salud”.
LA SEGURIDAD ES UNA ILUSIÓN
“Quien tiene miedo sin peligro inventa el peligro para justificar su miedo.”
(Alain)
De todos los apegos que podemos cultivar inconscientemente, el más común es el que nos aferra a nuestra propia vida. No importa que nos sintamos tristes o amargados. La mayoría de nosotros siente un profundo temor a la muerte. Simplemente la negamos. Aunque mueran cada día a miles de personas, nos da pánico que de pronto llegue nuestro turno y desaparecer sin más.
Por eso intentamos desesperadamente convertir nuestra existencia en algo seguro. Nos “esposamos” a través del matrimonio. Firmamos un contrato indefinido con una empresa. Solicitamos al banco una hipoteca para comprar un piso. Y más tarde, un plan de pensiones para estar tranquilos cuando llegue nuestra jubilación. En definitiva, seguimos al pié de la letra todo lo que nos dice el sistema que hagamos para llevar una vida “normal”. Y en la mayoría de ocasiones, lo hacemos movidos por nuestro apego a la seguridad.
Paradójicamente, en el nombre de la seguridad nos esclavizamos al pago de deudas mensuales, lo que nos lleva a aferrarnos todavía más a nuestro puesto de trabajo. De pronto tenemos miedo de perderlo todo y quedarnos sin nada. De ahí que, por más que nos esforcemos, no consigamos calmar nuestra inquietud interna…
¿Qué sentido tiene buscar certezas en un mundo absolutamente incierto e imprevisible? La única seguridad que tenemos es que la incertidumbre sólo desaparece con nuestra muerte. No podemos escapar de la inseguridad. El reto consiste en aceptarla e integrarla en nuestra cotidianidad. Y para lograrlo, no nos queda más remedio que girar 180º nuestro foco de atención, aprendiendo a confiar en nuestra capacidad de dar respuesta a las diferentes situaciones que vayan surgiendo por el camino. Si no confiamos en nosotros mismos, ¿quién va a hacerlo? Si no confiamos en la vida, ¿quién sale perdiendo?
LA INUTILIDAD DEL APEGO
“Tú eres lo único que falta en tu vida.”
(Osho)
Llegados a este punto, ¿es posible vivir sin apegos? Por supuesto, pero es una hazaña que requiere comprender que lo que necesitamos para ser felices está dentro de nosotros y no fuera. Y “ser felices” quiere decir que ahora mismo, en este preciso instante, “estamos a gusto, cómodos y en paz con nosotros mismos”. Es decir, que somos felices cuando en el momento presente –justo donde nos encontramos– “sentimos que todo está bien y que no nos falta de nada”. La trampa consiste en creer que algo externo, vinculado con el futuro, nos dará lo que nosotros no nos estamos dando aquí y ahora.
Sólo mediante este bienestar y equilibrio internos podemos cultivar el desapego en nuestra relación con todo lo demás. Al estar llenos por dentro, ya no esperamos nada de afuera. Tan sólo compartimos lo que somos, mostrándonos agradecidos de recibir lo que otras personas y la vida nos quieran dar. Si reflexionamos detenidamente, nos damos cuenta de que nada ni nadie nos pertenece. Sea lo que sea, tan sólo gozamos del privilegio de disfrutarlo temporalmente. Más que nada porque todo está en permanente cambio. De ahí la inutilidad del apego.
Así lo refleja una historia sobre Alejandro Magno. Se cuenta que encontrándose al borde de la muerte, el gran emperador macedonio convocó a sus generales para comunicarles que quería que su ataúd fuese llevado en hombros, transportado por los propios médicos de la época. También les pidió que los tesoros que había conquistado fueran esparcidos por el camino hasta su tumba. Y por último, les insistió en que sus manos quedaran balanceándose en el aire, fuera del ataúd, a la vista de todos.
Asombrado, uno de sus generales quiso saber qué razones había detrás de tan insólitas peticiones. Y Alejandro Magno le respondió: “Primero, quiero que los más eminentes médicos comprendan que, ante la muerte, no tienen el poder de curar. Segundo, quiero que todo el pueblo sepa que los bienes materiales conquistados, aquí permanecerán. Y tercero, quiero que todo el mundo vea que venimos con las manos vacías y que con las manos vacías nos marchamos.”
Artículo publicado por Borja Vilaseca en El País Semanal el pasado 6 de septiembre de 2009.
[…] Fuente: Borja Vilaseca […]
Muy bueno el post.Gracias!!!
Que gran mente capaz de escribir este artículo donde refleja claramente como funciona el ser humano apegado y siendo esclavos de nuestro propio sistema de pensamientos, gracias!!!!!
Y el sistema de pensamientos como lo adquirimos ? Por ósmosis ? O lo aceptamos inconsciente mente
Creo que es información que viene en nuestras células.
Excelente apreciación, gracias por compartirlo
Interesante post.
Genial el articulo,muy entendible y,constructivo…totalmente de acuerdo…
Muy buena. Publicación. Muchas gracias
APEGO sinónimo de inseguridad e insatisfacción, decestabiliza la buena armonía cuerpo mente. Lo podemos superar, está en nuestro interior, si, no podemos, busquemos ayuda la red hoy por hoy nos da la oportunidad de conocer lo que ignoramos, practicar métodos, estilos de vida uno como por ejemplo el HO’OPONOPONO filosofía de vida hawaiana ???? Y muchos más al que te adaptes. Gracias por compartir el artículo al autor del mismo pe????❤️ ????
APEGO sinónimo de inseguridad e insatisfacción, decestabiliza la buena armonía cuerpo mente. Lo podemos superar, está en nuestro interior, si, no podemos, busquemos ayuda la red hoy por hoy nos da la oportunidad de conocer lo que ignoramos, practicar métodos, estilos de vida uno como por ejemplo el HO’OPONOPONO filosofía de vida hawaiana ???? Y muchos más al que te adaptes. Gracias por compartir el artículo al autor del mismo pe????❤️ ????
APEGO sinónimo de inseguridad e insatisfacción, decestabiliza la buena armonía cuerpo mente. Lo podemos superar, está en nuestro interior, si, no podemos, busquemos ayuda la red hoy por hoy nos da la oportunidad de conocer lo que ignoramos, practicar métodos, estilos de vida uno como por ejemplo el HO’OPONOPONO filosofía de vida hawaiana ???? Y muchos más al que te adaptes. Gracias por compartir el artículo al autor del mismo pe????❤️ ????
APEGO sinónimo de inseguridad e insatisfacción, decestabiliza la buena armonía cuerpo mente. Lo podemos superar, está en nuestro interior, si, no podemos, busquemos ayuda la red hoy por hoy nos da la oportunidad de conocer lo que ignoramos, practicar métodos, estilos de vida uno como por ejemplo el HO’OPONOPONO filosofía de vida hawaiana ???? Y muchos más al que te adaptes. Gracias por compartir el artículo al autor del mismo pe????❤️ ????
Un articulo muy profundo…digno de ponerlo en practica…no solo tener en concepto…Buenísimo
Muy buena reflexión..me llegó¡
buen dia, muy bueno este artículo. es muy coherente en todo.
Interesante, solo una observación, Alejandro Magno no era, romano, era Macedonio.
Una realidad ineludible, tu eres tu y nadie mas lo hará por ti, ante esta situación fortaleza, tienes mucho que dar……
Claro y contundente…!!!!
Vivimos una epoca diferente,donde se requiere,este tipo de informacion para mejorar,nuestro nivel de vida.
Expectacular articulo….quisiera vivirlo…
Gracias Borja,tu aporte es muy valioso!
Excelente articulo mas en estos tiempos de consumismo..Todos sufrimos de Apego..!
Excelente artículo me conecto de nuevo con mi interior, gracias
Es excelente, veras y oportuno para la actualidad! Valoremos quienes somos, quienes queremos ser y que estamos haciendo para lograrlo!
Genial
Maravilloso artículo, Había leído sobre El Apego, pero la forma tan pedagógica en que lo ha explicado, hace que lo hagamos nuestros y lo integramos en nuestra forma de vivir la vida, poco a poco ir entendiendo y asimilando, que vale la pena y que no…perdemos mucha vida por no vivir de presente, de momentos, esa es la existencia, nos vamos con las manos vacías, pero nos podemos ir llenos del amor dado y del amor recibido. Genial el artículo!!!
Muy buena apreciación!
Gracias!!! Por invitarme a reflexionar dónde estoy parada.
Me ha encantsdo ,en este mómentó de mi vida necesitaba estas reflexiones y ,explicaciones que se nos escapan ,no somos capaces de reflexionar necesitando que otros lo hagasn por nosotros ,como en este caso ,una enseñanza que todos deberíamos saber pero, no la tienen que recordar.Gracias
¡Gracias, está más que claro, al final resulta una enfermedad, aunque si se percata uno de ello a tiempo, puede haber una cura!
No estoy de acuerdo con la totalidad del artículo, el apego va un poco más allá de un simple egoismo por mantener a la persona que uno ama a su lado. Los niños se apegan a sus padres, a sus hermanos, a una mascota, a un juguete, se siente seguros , cuidados y queridos. Los adultos sentimos apego por nuestros queridos y no considero que sea egoismo. Estoy convencida que las personas necesitamos vínculos de apego para ser felices
Maravilloso. Gracias!
Muy profundo análisis sobre el apego. Solo una pequeña aclaración Alejandro Magno…fue Macedonio no emperador romano.
Muy interesante…!!!
Me ayudó a descubrir los apegos que estaban escondidos.
Me pareció muy interesante cada artículo de ésta página…
Gracias por compartir muy útil para para continuar con el cambio de mi vida gracias.
Me encanto y atrapo hasta el final…….Una refleccion que deberiamos pensar cada dia al levantarnos,saberque despertamosuna vez mas a la luz de otro dia y que solo en cada uno de nosotros esta todo…….
Sí estoy de acuerdo en mucho que lo que se escribe pero si el estado de una persona es estar enamorado o apegado o como se quiera decir , esta claro que nos iremos con lo que nos llevaremos. ..nada . Pero este tiempo que estemos estaremos obtenirndo lo que deseamos .estar agosto con nuestro sentimiento , con nuestra decisión de vivir con una ilusión . Aunque no nos llevemos nada a otro plano . Si no crees que exista
Excelente!! Gracias!!
EXELENTE!!
Me encanto, xq nos refrezca sobre la apreciacion que tenemos de muchos de nuestros miedos,disfrazados de apego.
Difícil de digerir, pero más difícil llevar a cabo!!
Muy reflexivo….
Que importante saber como piensa y actúan los seres humanos. Gracias por compartir excelente realidad
Estos pensamientos deberíamos de leerlos diario para tenerlos muy presentes y conscientes todo el tiempo. Gracias por compartir! ???????????????????????????????? gracias Infinitas por el apoyo!
Es muy interesante este punto de ya que nos ayuda a ser más observadores con nuestras emociones, y clarifica lo que estamos haciendo de nuestra vida.
Es muy interesante este punto ,ya que nos ayuda a ser más observadores con nuestras emociones, y clarifica lo que estamos haciendo de nuestra vida.
Hola, primero gracias por el artículo, pero me gustaría hacerle una pequeña corrección la frase “Lo que más me sorprende de la humanidad son los hombres que pierden la salud para juntar dinero y luego pierden el dinero para recuperar la salud” claramente no es de Budha, en este caso es del Dalai Lama. Buen día.
Excelente artículo – Me sentí descrito alli, encarcelado en el apego sin poder ver mas allá. Nunca antes creí que estaría en esta situación, no la vi venir. Habrá que trabajar duro para superar esto y liberarme.
Gracias
Gracias. Siempre he sabido que la felicidad está dentro de nosotros y no afuera. Pero siempre me había preguntado cómo se que soy realmente feliz? Me diste claridad de nuevo gracias ?
Muy buena esta pagina se la recomiendo por su buen contenido
Espectacular…..gracias
El apego no es lo que aquí se suscribe…Bolwby se tiene que estar removiendo en su tumba… Además, el artículo es una mezcolanza de conceptos y opiniones varias con un toque mr. Wonderful. No podemos no tener apego, está estudiado en humanos y animales, precisamente un apego seguro permite el desapego
Porque al “ser querido”, a ese que está a nuestro lado, o se le ama o se le tolera…
El artículo me parece muy interesante pero lo que no encuentro saber es como se puede construir una relación a partir del desapego
Soy una persona apegada a todo y mi vida no es fácil y estoy trabajando en mi para ser feliz y dejar el apego
Saludos Borja espero visites los ángeles california
Alguien dijo que ‘las cosas importantes las aprendemos demasiado tarde”
Después de casi toda una vida, y después quizás de pensar que ya es tarde… Creo que a veces me he querido y a veces no, y que ahora son muchas más las veces que me siento en paz y verdaderamente feliz conmigo misma. Un abrazo
Gracias por compartir el conocimiento de este importante y vital tema del Apego con sabidura, yaque aqueja a gran parte de las personas en la sociedad mundial.
Esta tan mal este articulo qie apesta., esta presentando solo un lado negativo delnapego con un suave tinte budiste de la defición de apego.. Que mezzcla conceptos erroneamente y prejuicia al lector…
En verdad si el señor es un pseudo psicologo que agarre sus cosas y escriba en umn cosnultorio antes de dar atirculos que solo desarientan al lector o que solo busca seguidores incautos o ignorantes…
Que pena
No me cierra mucho lo del apego. Entonces si se muere un hijo no debo sufrir? Entonces puedo ser completamente feliz sin que nadie me ame de verdad? Somos amor necesitamos amor. Hay psicólogos que dicen que el apego es bueno porque necesitamos vínculos afectivos profundos. Creo que el equilibrio es lo sano y los extremos no son buenos
[…] la interdependencia se cultiva al lograr una sana emancipación emocional, también conocida como «desapego». Y este pasa por comprender que somos los únicos responsables de las decisiones que tomamos y de […]
Que podes contarnos de un apego por las mascotas? Un amigo esta gstando mucho dinero para llevar a sus perros a otro pais por un nuevo trabajo, y gastando extra por muebles que sean mas faciles de limpiar por sus mascotas?