Las once principales cualidades esenciales del Eneatipo 4 – Eneagrama
Las «cualidades esenciales» son las actitudes, conductas, fortalezas, habilidades, dones y talentos innatos que manifestamos de forma natural cuando vivimos conectados con el ser esencial y estamos guiados por la motivación trascendente. También son la manera consciente, sabia y proactiva con la que respondemos a determinados estímulos externos, permitiéndonos así preservar nuestro bienestar interno.
Las once principales cualidades esenciales del eneatipo 4 son:
Artístico. Suele ser una persona muy interesante. Su alma de poeta y espíritu bohemio le llevan a vivir una vida libre de las convenciones de su tiempo. También es un romántico empedernido y un enamorado del amor. Y tiene una vena cultural muy potente, con verdadera fascinación por el arte.
Autotrascendencia. Le es fácil desidentificarse del ego, comprendiendo que el yo es una ilusión. Esta capacidad para autotrascenderse le permite vivir de forma despersonalizada. No se toma en serio a sí mismo, pues sabe que no es el autor de su vida, sino un canal mediante el que la existencia se expresa.
Creatividad. Si bien es muy creativo e imaginativo, este talento no tiene por qué manifestarse solamente en expresiones artísticas. Se refleja ⎯especialmente⎯ en su forma de pensar, la cual tiende a salirse de la caja. Es un librepensador al que le encanta cuestionarse y profundizar acerca del porqué de las cosas.
Disrupción. Tiene la mente muy abierta y es un inconformista nato. Sin embargo su inconformismo no viene movido por la insatisfacción, sino por la curiosidad. Es una persona subversiva, transgresora y disruptiva, que cuestiona el orden social establecido para explorar nuevas formas alternativas de pensar y de vivir.
Expresividad. Una de las cosas que más le gusta en la vida es compartir su propia experiencia vital. Eso sí, con quien se lo pide y está genuinamente interesado. Tiene facilidad para sentir, gestionar y expresar sus sentimientos, conmoviendo a sus interlocutores con sus emocionantes y sugestivos relatos personales.
Inclusividad. Siente que puede ser él mismo en todas partes y rodeado de todo tipo de personas. Tiende a incluir y a relacionarse con cualquiera, sin importar su origen, estatus, cultura, profesión, raza, religión o incluso nivel de consciencia. Con cada uno de ellos sabe conectar con una parte de su propia humanidad.
Introspección. Le apasiona el mundo del autoconocimiento, la psicología transpersonal y la espiritualidad. Es un buscador que finalmente se ha encontrado a sí mismo, trascendiendo la búsqueda. Su profunda introspección le ha llevado a vivir esencialmente. Y a tener un mundo interior muy rico.
Resiliencia. Sabe lidiar con la adversidad, el infortunio y las vicisitudes de la vida con estoicismo. Es decir, con fortaleza, aceptación y resiliencia. Por más que una situación determinada pueda desestabilizarlo temporalmente, siempre acaba recuperando su estabilidad esencial, sacando provecho en forma de aprendizaje.
Neutralidad. Tiene la capacidad de ver y de interpretar la realidad tal como es ⎯neutra⎯, sin distorsionarla excesivamente. Y gracias a ello, no se complica la vida ni monta dramas. En el caso de sufrir algún contratiempo ⎯o tener algún malentendido con alguien⎯, enseguida lo resuelve sin quedarse enganchado.
Sensibilidad. Goza de una tremenda sensibilidad. Tiene la capacidad de sentir y percibir sensaciones muy sutiles a través de sus sentidos físicos. De ahí que tenga una propensión natural para emocionarse ante la belleza en general y cualquier expresión artística o cultural en particular. Este sentir es esencial, no egoico.
Singularidad. Es una persona genuinamente única, original, insólita e inimitable. Y es que no solo se conoce a sí mismo, sino que se atreve a ser quién es, expresando su singularidad en todas las áreas y dimensiones de su vida. Y como consecuencia vive una vida verdaderamente extraordinaria: la suya.