¿Cómo se descentra el Eneatipo 4? – Eneagrama
El «descentramiento» es un movimiento psicológico que posibilita la saturación y el cuestionamiento de nuestra personalidad. Y deviene reactivamente cuando atravesamos una situación de estrés y desequilibrio prolongada como consecuencia de habernos empachado del ego de nuestro eneatipo principal. Es entonces cuando de forma inconsciente ⎯y a modo de amortiguador psicológico⎯ empezamos a adoptar alguno de los patrones egocéntricos de pensamiento, sentimiento y conducta de los eneatipos con los que estamos conectados por medio de estas líneas. En algunos casos, podemos llegar a expresar estos comportamientos de una forma todavía más sombría e ignorante que los eneatipos a los que pertenecen.
No en vano, este proceso nos lleva a conectar con el lado más oscuro de los eneatipos a los que nos descentramos. Y actúa como una válvula de escape encaminada a desahogar temporalmente toda la presión y el malestar acumulados por seguir las estrategias inconscientes dictadas por el ego nuestro eneatipo principal. Eso sí, en caso de perpetuarnos en el victimismo puede provocar que de pronto lo veamos todo negro, llevándonos al borde de la depresión e incluso del suicidio. De ahí que este descentramiento sea una invitación a la autocrítica y una llamada al despertar. Si aprovechamos estos momentos de dolor y sufrimiento para crecer espiritualmente podemos tomar consciencia de que la manera en la que hemos venido pensando, sintiendo y actuando es profundamente nociva y equivocada.
El descentramiento del Eneatipo 4
El eneatipo 4 cuando se empacha de su propio ego puede descentrarse al eneatipo 2, conectando con la sensación de abandono y falta de amor. De pronto empieza a desatender sus necesidades emocionales, sintiéndose muy poco querido y volviéndose más demandante. Como consecuencia, emplea la manipulación y el chantaje emocional para obtener el afecto que cree que se merece. A su vez se muestra más soberbio, sintiéndose superior que los demás. Y no duda en entrometerse en la vida de sus seres queridos. Para profundizar más acerca del descentramiento ⎯y también de su lado oscuro⎯, es muy recomendable que interiorice la información relacionada con el ego del eneatipo 2.
El eneatipo 4 también puede descentrarse al eneatipo 1, conectando con la sensación de insuficiencia e imperfección. En este caso se vuelve mucho más exigente y moralista, juzgando a los demás por comportarse de forma distinta a cómo él considera que deberían comportarse. Tiende a exponer sus opiniones con cierto dogmatismo, intentando que sean plenamente compartidos por quienes le rodean. Y en caso de no conseguirlo, su hípersusceptibilidad provoca que se enfade, se indigne y se frustre con mucha facilidad. Para profundizar más acerca del descentramiento ⎯y también de su lado oscuro⎯, es muy recomendable que interiorice la información relacionada con el ego del eneatipo 1.
De este modo, para iluminar su propia sombra el eneatipo 4 ha de iluminar e integrar la sombra de los eneatipos 2 y 1, compartiendo muchos rasgos en común con estos dos tipos de personalidad.